Enología y Bodegas
Camprovín, como otros muchos pueblos de La Rioja, ha sido y es una localidad vitivinícola.
Se conoce, por testimonios de vecinos, que donde hoy en día están las viñas, que son en los terrenos más amplios y llanos del pueblo, antiguamente no había cepas. Esos campos se dedicaban al cultivo del cereal, la remolacha y otros productos de primera necesidad. Las viñas se plantaban en pequeños terrenos en escarpados, cerros, terrazas o cambarillas.
El vino siempre ha sido parte fundamental de las vida social y doméstica de los vecinos y vecinas de Camprovín. Es por eso que muchos de ellos y de ellas realizaban el vino en sus propios lagares, en las bodegas que se ubicaban en sus casas o en el Barrio Bodegas.
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TIPOLOGÍAS DE VINO
Antaño, los viñedos eran mixtos, es decir, se mezclaban todas las uvas. No elaboraban o vendían la uva separando cada tipo, sino con lo que había en cada viña o finca.
EL CAMBIO CLIMÁTICO Y LOS TIEMPOS DE VENDIMIA
El trabajo en la viña ha notado a lo largo de las últimas décadas un cambio importante en los tiempos de maduración, los mejores lugares para la uva e incluso ha descuadrado eventos tan marcados como el de vendimia que ahora ha de realizarse casi dos meses antes.
Que no te la den con queso
Antiguamente la elaboración y producción de vino formaba parte de la economía de subsistencia de Camprovín y se vendía el vino a granel en pellejos a diversos pueblos de la sierra que no disponían de él. Aun así, siempre se dejaba cantidad suficiente para el autoconsumo.
LA VENDIMIA
Tras mucho trabajo en el campo durante un largo año, llegaba la vendimia. Era el momento de reunir a toda la familia en la tarea, incluido mujeres, niños y niñas (no había escuela en esas fechas). Los fines de semana llegaban también familiares de fuera que aprovechaban la actividad del pueblo para festejar la recolección de la uva. Se juntaban además con otras familias y amigos para ayudarse en dichas labores de la vendimia.
Uno de los vecinos más mayores del pueblo nos cuenta con emoción que antes, la vendimia, eran días de fiesta, ya que aparte de trabajar se disfrutaba esos días con la familia y amigos, sobre todo durante los fines de semana.
ELABORACIÓN DE VINO
Después de recoger la uva era el momento de trasladarla a los lagares de las bodegas en las comportas (recipientes hechos con madera de chopo) que iban colocadas a lomos del ganado.
Seguido de ello, se pesaba y se depositaba la uva a los lagares para ser pisadas. Luego, durante el proceso de fermentación del mosto, se tenía que tener mucho cuidado, ya que existía peligro de que se hubiese acumulado el tufo. Gracias a las chimeneas de ventilación o tuferas y a las técnicas de prevención que se habían heredado de padres a hijos, podían estar más tranquilos.
Y por último, se sacaba el vino por la canilla ubicada en la parte central e inferior del lagar y se introducía en los pellejos para ser transportado a las cubas que están en las bodegas. Como nos cuentan los lugareños de Camprovín, el vino se hacía en los lagos y se almacenaba en los calados. Un calado es un lugar subterráneo donde se conserva el vino a una temperatura constante durante todo el año y que fluctúa en verano a unos 15º y en invierno a unos 11º o 12º.
Un paisano de Camprovín nos habla de las bodegas rupestres y de cómo se elaboraba el vino antes incluso de lo que los más mayores recuerdan.
FINALES DEL DÍA CON VINO EN EL BARRIO BODEGAS
La bodega de Marcelo era una de las más conocidas en Camprovín. La razón según explican los mismos paisanos del pueblo es "que invitaban a beber vino a todo el mundo". Esto generaba una actividad y movimiento en esa y otras bodegas al final de cada día de trabajo, donde los hombres traían algo de comida y bebían el vino de la bodega.
Esta actividad se compaginaba con la visita al bar después de la merienda/cena y los juegos de cartas, alguna copa y quizás alguna jota.
Un paisano nos cuenta sus vivencias:
El Barrio bodegas es uno de los espacios con más memoria de Camprovín. Cada construcción a la vista, cuenta con un calado en su interior y, por supuesto, con miles de historias que, si te quedas el tiempo suficiente, descubrirás en boca de sus gentes.
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